Los sensores y el internet satelital en la agricultura de precisión

 

Actualmente, hay una tendencia en el sector agrícola que implica la utilización del servicio proporcionado por las empresas de internet satelital y varias tecnologías que permiten gestionar los cultivos de manera eficaz y precisa. Se trata de la agricultura de precisión cuya aplicación requiere de varias tecnologías, como:

 

• Herramientas de software para respaldar las decisiones.
• Sistemas que predicen y monitorean el rendimiento del campo.
• Equipos robóticos para la utilización precisa de semillas, pesticidas, fertilizantes, entre otros elementos.
• Sensores para la medición de parámetros y de funcionamiento remoto para monitorear el rendimiento de los cultivos y detectar cualquier problema.

 

Hace algunos años, se enfatizó la diferencia entre la agricultura de precisión que es una gran usuaria del internet satelital y la agricultura inteligente. Esta última está conformada por las tecnologías enlistadas, en cambio, la agricultura de precisión hace referencia a aquellas tecnologías que, dependiendo de las variaciones en el campo, permiten el seccionamiento de extensas hectáreas de cultivo en áreas de gestión y, en vez de enfocarse a estas como una sola unidad, gestionar cada zona de manera individual.

 

Ahora bien, en todo esto, los sensores (que dependen del internet vía satélite para su funcionamiento) juegan un papel crucial y no pueden faltar en los sistemas de agricultura de precisión. A continuación, les diremos cómo se utilizan para que los conozcan mejor y aprovechen nuestros servicios de conexión para implementarlos.

 

El papel de los sensores y el internet satelital

 

Los sistemas de agricultura de precisión requieren de sensores, lo que involucra el funcionamiento de datos proporcionados por el servicio de las empresas de internet satelital, información GPS, monitores de rendimiento, dispositivos colocados en drones, entre otros. Hay ciertos sensores que se montan en distintas áreas de monitoreo dentro del campo para medir parámetros inmediatos de los cultivos a medida que crecen.

Entre los sensores utilizados, destacan los siguientes:

 

Sensores de humedad

 

Su función es medir la tensión de líquido en el suelo o la cantidad de humedad que este contiene. De esta manera, los agricultores tienen información valiosa para mejorar su toma de decisión acerca de varios aspectos, como la gestión de los riegos o el crecimiento de ciertas especies.

 

Las herramientas que determinan el nivel de humedad en el suelo han existido desde hace mucho, no obstante, han ocurrido notables mejoras tecnológicas recientemente en cuanto la medición de la humedad a diferentes profundidades y usando únicamente un dispositivo, una transmisión constante de la información a programas de computadoras o aplicaciones con el internet satelital como medio e instalaciones más simples y cómodas.

 

Sensores de conductividad eléctrica

 

Se trata de un sensor utilizado para el suelo que, usualmente, se complementa con los sensores de humedad, debido a la interrelación que hay entre los dos parámetros. Al realizar lecturas de la conductividad eléctrica en el suelo, los agricultores pueden tener un conocimiento más claro acerca de la salinidad presente para mejorar la gestión en la utilización de fertilizantes y de los riegos.

 

Sensores de nitrógeno

 

El nitrógeno conlleva varios efectos en las plantas, por ejemplo, en la forma de su sistema radicular, los periodos de floración, el crecimiento de las hojas, la senescencia, entre otros aspectos. A ello se debe la importancia de medir los niveles en el suelo por medio de sensores específicos operados con internet satelital, ofreciendo así notables beneficios para la industria agrícola; sin embargo, son muy complejas las reacciones de este elemento químico en el suelo, por lo que las lecturas proporcionadas no son 100% confiables para manejar fertilizantes nitrogenados, como nitrato de amonio, urea, DAP, MAP y sulfato de amonio.

 

Otros sensores

 

Igualmente, hay sensores que se colocan en el tallo u hojas de las plantas para obtener información valiosa acerca de su estado, por ejemplo, si presentan estrés por exceso de agua o la absorción que realizan de este líquido. Hay incluso tecnologías muy novedosas que implementan sensores esbeltos basados en grafeno para grabar los sensores en las partes de las plantas.

 

Entre los parámetros que igual pueden medirse con ayuda de los sensores, destacan la temperatura del aire o del suelo y el pH de la tierra. Toda la información recopilada en conjunto permite que los agricultores gestionen mejor sus campos y tomen las mejores decisiones en situaciones críticas.

 

Si bien los sensores colocados en el campo aportan muchos beneficios, presentan una limitación: ofrecen únicamente datos acerca de una cantidad pequeña de plantas y de una zona específica en las hectáreas de cultivo, por tal motivo, es necesario determinar una buena ubicación o que requiera más monitoreo para montar los sensores. En caso de que sea alta la variabilidad en el campo, se requerirán más sensores, lo que aumentará el costo del sistema.

 

Pese a los gastos requeridos para modernizar las actividades agrícolas, realmente valen la pena por las ventajas que ofrecen a largo plazo. Como mencionamos, es importante contar con servicio de internet, pero tiene que tener un buen ancho de banda y ser proporcionado por un proveedor confiable y con experiencia.

 

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